MENSAJE
DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA
"imagen:Nuestra Señora de las Rosas de Heroldsbach (Alemania-1949)"
“Queridos Hijos, hoy
les invito nuevamente a antender Mis Mensajes que Yo les he dado aquí, pues,
ellos son los últimos para la humanidad y muchos aún están durmiendo en el pesado sueño del pecado.
Recen, recen por todos
aquellos que están en ese sueño mortal, porque en breve serán despertados por
los truenos de la Justicia Divina en el Gran Castigo que caerá sobre este mundo.
Sí, en los tres días de
tinieblas los demonios vendrán y agarrarán a aquellos que se hicieron de sordos
a Mi voz.
En verdad Yo clamé, Yo
clamé en los cuatros rincones de la tierra llamando a Mis Hijos a la conversión,
pero Mi voz calló en un inmenso desierto. A cada día que pasa la humanidad
termina por hundirse más en el lodazal del pecado, de la indiferencia y de la
dureza de corazón.
Por eso Mis Hijos, ahora
que ya estamos cerca de la hora de la Justicia Divina,refervoricen sus
corazones en la oración, en la meditación, en la obediencia a Mis Mensajes,
para que Mi Hijo Jesús pueda aprobarles cuando Él comience el gran examen de
toda la humanidad.
Examinará la humanidad
con medida de fuego y ¡Ay! de aquellos que no fueren aprobados. Por eso Mis
Hijos, conviértanse, certifíquense sin demora porque solamente así Yo podré
llevarles para aquellas Moradas Bellísimas que el Padre preparó para aquellos que
son fieles a Él y que viven en Santidad en Su Presencia.
Divulguen más Mis
Mensajes de Heroldsbach, de Heede, de Ezquioga y La Codosera, para que así más
almas se conviertan y Mi Corazón Inmaculado pueda obtener más conversiones con
el aumento de las oraciones de todos.
Continúen rezando Mi
Rosario todos los días.
A todos Yo bendigo con
amor: de LOURDES… de HEROLDSBACH… y de JACAREÍ.
MENSAJE
DE SANTA LUCÍA
"imagen: Aparición
de Santa Águeda a Lucía en su sepulcro en Catania. En esa ocasión,
Lucía pidió la cura de su madre a Santa Águeda y la Santa accedió.
(Foto)."
“Amados Hermanos Míos,
Yo, Lucía, vengo nuevamente hoy para decirles: “Suban, suban en el amor,
rezando cada vez más con el corazón, meditando cada vez más los Mensajes de la
Madre de Dios, en la Palabra de Dios y sobretodo, abriendo sus corazones al
Espíritu Santo, que en estos tiempos procura almas abiertas, dóciles y bien
preparadas para Él, para derramarse en ellas como agua, como lluvia abundante, hasta
hacer los corazones transbordar de Sus Gracias.”
Sí, el procura almas de
intensa oración, de intenso amor, pero no encuentra. Si el encuentra en ustedes
esas almas, entrará y hará verdaderamente maravillas en sus almas y sus
corazones.
Recen sin cesar, para
que verdaderamente ustedes puedan subir más y más en los grados del Verdadero
Amor, hasta que el Espíritu Santo pueda venir, vivir y actuar en ustedes hasta
llevarles a la Santidad plena.
Continúen meditando, sobretodo,
aquello que Yo les dije en todos Mis Mensajes. Son muchos aquellos que no
meditan en Mis Mensajes, por eso están siempre pobres, tibios, fríos y presos a
las cosas del mundo.
Cuando ustedes
comprendan la belleza de todo aquello que Yo ya les dije, entonces,
verdaderamente, sus ojos serán iluminados por una luz maravillosa, nuevos horizontes
de Santidad se abrirán delante de ustedes y ustedes se sentirán enamorados por
el Señor y por Su Madre, por ver cuan grande y cuan bella es la vida
maravillosa de la Santidad que les preparan y que Ellos destinaron a ustedes.
A todos Yo bendigo con
amor: de CATANIA… de SIRACUSA… y de JACAREÍ."
MENSAJE
DE SAN GERARDO
“Amados Hermanos Míos,
Yo, Gerardo, Me alegro por venir una vez más hoy del Cielo, bendecirles y
decirles a todos: “Esfuercen sus corazones para crecer en el Verdadero Amor.”
Digan todos los días “No”
a una voluntad suya y hagan lo contrario de lo que la voluntad de ustedes
quiere. De esta manera, ustedes crecerán continuamente en la mortificación del “Yo”,
de la propia voluntad de ustedes y se tornarán cada vez más dóciles, cada vez
más abiertos a la Voluntad de Dios y de la Madre de Dios.
Todos los días hagan
también un voto de procurar cumplir, ejercitar una virtud. De esta manera, sus
corazones se sentirán incentivados y emulados a procurar cada vez más el bien,
la perfección, la Santidad.
Lean todos los días el
libro “Imitación de Cristo”, pues, Yo lo leí todos los días de Mi vida y ello
fue mi gran maestro de amor y santidad.
Recen el Rosario todos
los días, porque el Rosario que Yo rezaba tenía mucho más poder de que todas
las recomendaciones, todos los consejos, todas las misiones de las cuales Yo
participaba y en las cuales Yo hablaba, hacía exhortaciones a los pecadores
para que ellos se convirtiesen.
Sí, verdaderamente los
pecadores que Yo no convertía durante el día en Mis exhortaciones, la noche
cuando rezaba el Rosario por ellos, los convertía y al día siguiente, ellos ya
venían a procurar la reconciliación con Dios y la conversión.
Nada es más poderoso
para salvar almas de que el Rosario y sobretodo, nada es más importante para
salvar sus propias almas de que el Santo Rosario.
No hay pecado, no hay
mal que el Santo Rosario pueda vencer. Por eso Yo digo: “El pecador que
persevere en la oración del Santo Rosario, se salvará ciertamente, como
ciertamente se condenará el alma que desprecie y deje el Rosario.”
Recen el Santo Rosario
todos los días y Yo prometo también darles con Nuestra Reina Santísima, todas
las gracias necesarias para la salvación de ustedes. Yo amo a cada uno de
ustedes y cuido de cada uno de ustedes con amor.
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