MENSAJE
DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA
“Queridos hijos, hoy,
llamo a todos, a todos ustedes nuevamente a dejar Mi Llama de Amor entrar en
sus corazones y realizar maravillas en ellos.
Nada en este tiempo es
más importante que tener Mi Llama de Amor. Aquellos que la tienen, vencen todo,
vencen toda cruz, toda prueba, todo sufrimiento y permanecen firmes continuando
caminando e incluso corriendo en dirección al Cielo y a la Corona de la Vida
Eterna.
Con Mi Llama de Amor,
que es el propio Espíritu Santo, cada uno vence todas las propias flaquezas y
miserias, y todos los días crece sin parar en el camino de la perfección, en el
camino de la santidad y del verdadero Amor a Dios.
Cuando se tiene Mi
Llama de Amor, todas las miserias son quemadas en esa Llama porque el amor hace
con que desaparezcan una multitud de pecados. Pidan pues Mi Llama de Amor, para
que así, esa Llama vaya quemando todos los pecados que ustedes tienen y
haciendo a todos ustedes vivir siempre y cada vez más en Dios y Dios vivir en
ustedes, y vivir en Mí y Yo vivir en ustedes mismos.
Continúen rezando Mi
Rosario todos los días. Por medio de ello, siempre más abrasaré sus corazones
con Mi Llama de Amor. Recen el Rosario por la salvación de la humanidad, pues,
ella corre un gran peligro. Recen por ustedes mismos y por su perseverancia.
A todos Yo bendigo con
amor: de LOURDES… de LA SALETTE… y de JACAREÍ.”
MENSAJE
PRIVADO PARA LEANDRO, POSTULANTE DE LA ORDEN
“Mi amadísimo hijo
Leandro, te doy los sentimientos por el fallecimiento de tu padre.
No temas, estoy
contigo, nunca te dejaré, estaré siempre a tu lado para protegerte, para
ampararte, para amarte y guardarte.
No temas nada porque tu
padre ya está Conmigo en la Gloria Eterna, está feliz Conmigo en el Cielo.
Tu “Sí” y los méritos
que Mi hijito Marcos Tadeo ofrecieron por él, consiguieron para él la salvación
eterna. Alégrate porque tu padre será feliz por toda la eternidad, escapó del
infierno y Yo cumplí Mi promesa: “Que todos aquellos que Me sirviesen con amor Yo
salvaría y también salvaría a sus seres queridos.”
Por eso hijito, si
quieres llorar, llore de añoranza y de alegría, no de tristeza, porque tu padre
está en la Vida Eterna, está en la Gloria a Mi lado muy feliz en el Cielo.
Alegra tu corazón porque a Mi lado él nunca más sufrirá y gozará de delicias y
alegrías que nunca tendrán fin.
Imítelo en la bondad,
en el amor que él tenía para Conmigo, para que tú también te juntes a Nosotros
en esta fiesta que jamás acaba aquí arriba en el Cielo.
Yo te bendigo con amor
y te digo: “No temas, te di a Mi hijo Marcos por padre, amigo, superior,
consejero, apoyo y compañero para que nunca, nunca te sintieses solito. En el
amor de él, tú siempre sentirás el Mío y en el cariño de él por ti, tú siempre
sentirás el Mío también.”
No temas Mi hijo, Yo
estoy contigo y nunca te dejaré. Soy tu Madre, estoy aquí a tu lado y Conmigo
no debes temer nada.
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