24 de Agosto del 2017
Mensaje Público
Nuevamente
veo una gran llama que he llegado a reconocer como el Corazón de Dios
Padre. Dice: “Yo soy el Padre de todas las naciones y de cada
generación. Yo vengo para instruir, para guiar y para informar. En el
mundo, las fuerzas malignas están uniéndose para promover la falta de
paz. ¿Por qué Satanás no quiere la paz? Cuando hay paz en los
corazones es más probable que las almas se reconcilien Conmigo. Los
corazones que constantemente están preocupados no rezan bien y pronto
empiezan a confiar solamente en los esfuerzos humanos. Yo sigo
invitando a que se una el bien para que se fortalezca con la unidad.
Esa es la forma de combatir el mal.”
Maureen
dice: “Papá Dios, nos diste ayer el mensaje diciendo que el 7 de
octubre recibirían la Bendición Patriarcal solamente los que estén en el
Campo de los Corazones Unidos. ¿Serías tan amable de extender eso para
incluir a los que estén en la Capilla de los Corazones Unidos? La
Capilla también honra a los Corazones Unidos.”
Dios
Padre dice: “Quiero cumplir tu petición, pero la Capilla no sería
suficiente para toda la gente que va a querer estar ahí. Entonces
tendrías a los que se queden afuera de la Capilla, quienes se
preguntarán si recibieron la bendición.”
“Vamos
a dejarlo como está, que los que estén en el Campo sean los que reciban
la bendición. Desde toda la eternidad Yo he sabido que estaría dando
Mi Bendición Patriarcal durante estos tiempos. Va a fortalecer el bien
que hay en los corazones. Hará que Mis hijos regresen a Mí.”
“Yo soy un padre verdadero que quiere guiar y proteger a cada uno de Mis hijos. Cooperen con Mis esfuerzos.”
Lean Gálatas 5:14-15, 22-23
Porque
toda la Ley está resumida plenamente en este precepto: Amarás a tu
prójimo como a ti mismo. Pero si ustedes se están mordiendo y devorando
mutuamente, tengan cuidado porque terminarán destruyéndose los unos a
los otros. …Por el contrario, el fruto del Espíritu es: amor, alegría y
paz, magnanimidad, afabilidad, bondad y confianza, mansedumbre y
temperancia. Frente a estas cosas, la Ley está de más…
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